La ciudad de Cuzco, considerada como el Ombligo del Mundo y capital del Imperio Incaico, fue declarada por la UNESCO como Patrimonio Nacional de la Humanidad en el año 1983 y es que no cabe duda que esta maravillosa ciudad es uno de los principales destinos del Perú.
Las pintorescas calles de la ciudad de Cuzco albergan atractivos incas tales como el Koricancha y el Palacio de Inca Roca, así como también, construcciones con un peculiar estilo barroco-andino como la Catedral y la Iglesia de la Compañía. Por otro lado tenemos el pintoresco y acogedor barrio de San Blas, cuna de los más destacados artesanos del departamento.
Cuzco no es sólo historia y cultura, sino que también es muy conocida por su entretenida y agitada vida nocturna. Existe una amplia variedad de bares, restaurantes y cafés, en donde convergen turistas locales y extranjeros, lo cual hace la experiencia de viaje mucho más agradable y haciendo posible un intercambio cultural muy interesante.
A tan sólo diez minutos de la ciudad se encuentra la Fortaleza de Sacsayhuamán y no mucho más lejos, los sitios arqueológicos de Qenko, Pukapukará y Tambomachay, que son edificaciones de piedra construidas durante el Imperio Incaico.
Otra zona de incomparable belleza y mucha tranquilidad, es la zona del Valle Sagrado de los Incas, que se encuentra a una hora de Cuzco. Aquí podrás encontrar los poblados de Pisac, Maras, Chinchero y Ollantaytambo, en donde se encuentra la estación de tren para llegar hasta la ciudadela de MachuPicchu. Existe también la posibilidad de acceder a la ciudadela a través de una de las rutas del Camino Inca, un conjunto de senderos llenos de aventura y de increíbles paisajes. La ventaja de llegar a través del Camino Inca es que resulta una excelente ruta para trekking, ya que está rodeada de imponentes construcciones y de una variada flora y fauna.