Teatro para bebés - I love you

Consigue que los bebes estén atentos y disfruten

Hay pocas canciones. Y creo que el precio es un poco elevado

Se hace muy ameno tanto para los enanos como para los adultos. No tiene precio ver las caras de asombro de los pequeños!!! Repetiremos!!!

Las niñas estuvieron enganchadas todo el rato

La historia no estaba muy elaborada, un poco floja

La peque estuvo en todo momento atenta, todos disfrutamos

El que sacaran a los niños a bailar

No se me ocurre ninguna cosa que no me gustara

Los pequeños encantados, con la interpretación y simpatía de la actriz. Se hace muy corto.

Me hubiera gustado un guión. Una historia.

Nuestro bebé de 11 meses disfrutó mucho del espectáculo, la artista era muy dulce y los colores, la música, la sencillez del espectáculo fueron en conjunto lo que más nos llamó la atención. No sabíamos lo que íbamos a ver pero el resultado fue estupendo, nuestro pequeño incluso se reía a carcajadas!

La aglomeración de gente y carritos en la entrada del local. Si tienes que recoger las entradas media hora antes te encuentras con el mogollón de gente que espera para la obra anterior a la tuya y no encuentras sitio determinado para dejar el carrito.

Un espectáculo muy adecuado para bebés. Muy emocionante, también para los papás. Se hizo cortísimo, lo que es de agradecer. El peque estaba encantado, sobre todo al final que ya iba metiéndose más en la historia. La actriz está muy atenta a los peques para buscar de qué forma puede hacer partícipe a cada uno de una forma muy natural y agradable.

Quizá no da tiempo a que los peques se sientan a gusto y en confianza para interactuar y meterse más, pero también es cierto que si durase más se aburrirían.

Fuimos con nuestra peque de 11 meses y aunque aun no sabia interactuar cuando por ejemplo pedían aplaudir o bailar, estuvo durante los 30 minutos que duró la obra con la boca abierta y sin pestañear.

Al final de la obra piden bajar al escenario a los peques que quieran bailar, y los padres bajaban a bebés que realmente no querían o no sabían por lo que se ponían a llorar y los padres tenían que volver a buscarlos... al ser un sitio muy pequeño, al final era un desbarajuste.

A los papas nos gustó mucho, pero realmente quien disfruto de la obra fué mi hijo de dos años que desde el principio engancharon su interés y le sumergieron en un mundo de sensaciones y emociones. El colofón final fue bailar todos juntos en el escenario. Animaría a la Escalera de Jacob a que cree nuevas obras como estas ya que mi familia hemos visto las tres destinadas a niños de 2 años.