Milagros

La obra es entretenida y divertida. Te da qué pensar.

Totalmente recomendable. Muy adecuada la introducción. Actores geniales.

Te atrapa desde el inicio con un discurso que, lejos de sonar populista, adentra al espectador en la cruda realidad del sistema económico mundial, sin hacer un detallado estudio, evidentemente. Ni falta que hace. La presencia de un texto muy bien escrito adopta una importancia, para mi gusto, mayúscula. Y luego la forma, la estética de la obra. Cómo diferenciar con colores y materiales el status de cada personaje y sus contrastes, creo, es una de las mejores elecciones que el director usa para seguir ensalzando ese discurso. Y luego los personajes...Fantásticos. Histriónicos, pero comedidos en sus decisiones; exagerados, pero contenidos en sus acciones. Cabe destacar el monumental trabajo de un personaje que, por más que parece que es el personaje menos importante debido a su bajo status, se afianza como una de las grandes apuestas interpretativas del elenco. El personaje llamado 'Milagros', interpretado por Pilar Sánchez, aporta ese trabajo emocional y desgarrador, necesario para equiparar la propuesta de los otros personajes. Además, y esto me gustó particularmente, hay un arco en este personaje muy detallado. Se ve y se goza cuando lo aprecias. No obstante, el elenco está muy acompasado y no chirría que, pese a que los diferentes personajes puedan estar en "códigos diferentes", logre dar la sensación de que éstos bailan al son de una misma propuesta. Salí de la sala pensando que había visto una muy buena obra. Enhorabuena.

¿Si fueras el organizador o promotor del espectáculo que harías diferente?

Lo movería

¿Si pudieras hablar con el artista (cantante, actriz, actor,...) qué le dirías?

Enhorabuena.

Obra redonda. Texto e interpretaciones de lujo bajo una excelente dirección que nos guía por esta experiencia teatral que no deja indiferente. La risa ante el esperpento absurdo del personaje de la señora de la casa, da paso a lo brutal del nacimiento de una revolución antinatura, que no necesita ni de cánticos ni de guillotinas para impartir esa justicia que siempre ha convenido al poderoso, la que se inclina a su favor. Y a partir de ahí, comienza un baile de emociones en el que el espectador queda atrapado y salpicado. Y lo gore y lo fantástico (plástico de primera ley) se mezcla y te deja reflexionando a la salida del teatro. No encontrarás otra obra así en cartel. Y mucho menos en estos tiempos de verano que parece que sólo hay lugar a "platos" ligeros y de fácil digestión. Pero bueno, siempre podrás tomarte unas cervezas en esa consabida libertad madrileña a la salida y comentar con tus acompañantes lo que acabáis de ver (aunque el tema de no encontrarte a tu ex no se garantiza).

Llegamos con calor. Dentro se estaba fresquito, de miedo. Nos acomodamos en las butacas. Es verano, es domingo, estamos de vacaciones. Qué bien se está. Empieza la función. Nos lanzan una pregunta. Yo me la reformulo a mi manera: ¿Qué pasaría si todo lo que creo seguro, lo que me da estabilidad, dejara de serlo? ¿Cómo reaccionaría? Todos tenemos zonas oscuras, miedos. ¿Se activarían? ¿Qué hay en mí de cada personaje? Escribo así para no desvelar nada. Es un placer entrar en una sala de teatro a que te cuenten una historia destilada con dedicación, y que los actores pongan delante de ti todo su trabajo y esfuerzo. Cuando vayáis a ver "Milagros" escuchad las palabras y quedaos con los recovecos del texto. Hay chistes de humor negro por aquí y por allá. Disfrutad de la progresión de la historia y de la estética. Me llamaron la atención los colores. Fijaos en la cuerda roja con la que dos de los personajes atan a un tercero. No sé por qué, el rojo de esa cuerda en el centro del escenario me gustó mucho. Y los dos gritos de la mujer cuando le colocan encima del... . Y mucho más.

¿Si fueras el organizador o promotor del espectáculo que harías diferente?

Fuisteis muy amables en vuestra recepción. Nos sentimos acogidos y a gusto. El lugar es estupendo e ideal para la magia del teatro. Un lujo tener opciones así en las tardes del verano en Madrid.

¿Si pudieras hablar con el artista (cantante, actriz, actor,...) qué le dirías?

No dejéis de trabajar nunca. Es admirable vuestra dedicación al teatro y vuestra capacidad de trabajo. Estaremos atentos siempre a vuestras propuestas. ¡Gracias!

Una puesta en escena, que con elementos muy sencillo, pero con una estética que me encantó… muy “plástica”. Elementos que son suficientes para reforzar un texto muy bien escrito, mordaz y supercrítico... y regado con mucho, mucho humor, y una buena dirección. En cuanto a la interpretación actoral de los tres personajes, felicitarles, cado uno con su “puntito”, con un histrionismo y un esperpento…equilibrado entre los tres, que hace que el texto brille. Y, además de pasar un muy buen rato, en una salita de teatro pequeña y preciosa (es como un miniteatro superacogedor)...…es un texto que al salir del teatro…da para reflexionar….. algo importante en los tiempos que corren. Enhorabuena al autor, al director y al elenco.

La obra es muy entretenida desde la introducción que hace el director hasta cada escena de los personajes que pueden parecer previsibles por los estereotipos que representan pero sorprenden con unos diálogos y escenas muy bien hiladas unas con otras con muchas metáforas sobre la sociedad que pueden hacer reflexionar desde el humor. Local muy pequeñito. Bueno para disfrutar del espectáculo pero llenaría locales mayores. No pato para los trabajadores que piensen ser clase media... O mejor dicho, recomendable para ellos sobretodo jeje

Obra bien escrita, bien dirigida y bien interpretada por un elenco que está en su sitio, lo cual es muy importante recalcarlo puesto que se trata de un estreno. Una obra con mensaje claro que señala al elefante que está en la habitación pero que nadie se atreve a señalar, que no es otro que el poder omnímodo que tiene una minoría de personas en un mundo cada vez más globalizado a su conveniencia. Numerosos detalles de humor negro, lo que le hace alejarse de lo meramente panfletario y un final catártico que deja la obra redonda.

Mi experiencia ha sido muy positiva. He podido ver una comedia acidoa, negra y llena de reflexiones. Bien dirigida y muy bien interpretada. Nos habla de la diferencia de coses y el comportamiento desmesurado cuando el status social alto,cae. Muy buena interpretación de los actores. Histrionismo muy alto en los señores, ante la magistral actuación de la criada, que marca el equilibrio,y da el toque perfecto a la obra por su mantenida y contenida actuación que equilibra el peso de la sociedad de clases.

¿Si fueras el organizador o promotor del espectáculo que harías diferente?

No aportaría mas

¿Si pudieras hablar con el artista (cantante, actriz, actor,...) qué le dirías?

Les daría mi más profunda enhorabuena

'Milagros' es una rara avis. Es de esas pocas obras que logra tocarte, al mismo tiempo, la fibra emocional e intelectual. Te ríes, te enfadas, te cuestionas, te sorprendes, odias y amas a los personajes que despliegan todos sus matices ante el espectador. Su modesta puesta en escena no le quita un ápice de dramatismo ni comedia a lo que estamos viendo en el escenario. Está lo que tiene que estar. Ni más ni menos. Muy recomendable si quieres darte un homenaje y huir del teatro fast food.