El Hijo Prodigo

"El hijo pródigo", es una adaptación teatral de la Parábola bíblica homónima. En esta historia original, el director Alan Greyck, nos propone viajar al pasado varias veces durante el transcurrir del relato, a través de la creación de una atmósfera que permite que el público se sienta parte. En ese pasado lejano, la voz del Padre Celestial se expresa a través de diferentes eventos y personajes, revelando su naturaleza y amor por la humanidad. En el presente, se delinean personajes principales y secundarios. Entre ellos un padre muy generoso, Daniel Noir, y sus tres hijos: Máximo, Benjamín y el menor Julián (el hijo pródigo). Con la ayuda de su abogado de confianza, Daniel decide adelantar su herencia en vida y darle la parte que le corresponde a Julián, quien se verá tentado a malgastar todo ese capital (noche, alcohol, drogas, etc.). Así, luego de una suma de malas decisiones y acercarse a pésimas compañías, queda en ruinas y degradado como ser humano. Es ahí, en medio de esa situación límite que decide regresar ... Generosidad, misericordia, humildad, arrepentimiento y amor incondicional, son algunas de las enseñanzas que resalta esta historia, en la cual todos y cada uno de los espectadores, encontrarán, sin duda, más de un elemento identificatorio, que los transportará a acercarse a emociones muy profundas, precisamente porque están íntimamente ligadas a la esencia humana.